Contrario a la introducción del programa Los cuatro grandes , de Súper Radio, en los 102. 3, del FM estéreo, hace cuarenta años terminó la historia . Así es, y el próximo sábado 10 de abril se conmemoran los cuarenta años de la disolución de The Beatles, el mejor grupo musical anglosajón del siglo XX . Por eso, hoy queremos continuar nuestro recorrido por su catálogo , y nada más y nada menos que con la que muchos consideran su mejor canción: “A Day in the Life”. Un tema genial, único, clásico desde todo punto de vista (lírico, musical, técnico, de producción, etc.), una verdadera obra maestra de la música popular contemporánea, que rompió esquemas y terminó de poner a todo mundo en guardia, porque ¿qué más se podía hacer después de esto? El cierre perfecto para el álbum más importante de la era del rock : el Sargento Pimienta . Ficha técnica Título: “A Day in the Life” (canción) Duración: 5´ 08 s (indefinidamente) Fechas de grabación: 19 y 22 de enero, y 3 y 10 de fe...
Comentarios
Una curiosidad: ¿de dónde sacaste la cita?
Natasha
Natasha:
En diciembre puse un post sobre Eliot, con el link. Aquí dejo los dos:
http://asterion9.blogspot.com/2008/12/t-s-eliot-la-crtica-literaria-y-sus.html
http://www.poesiadigital.es/index.php?cmd=documento&id=10
Gracias a ambos por pasar.
Aquí me parece que Eliot hace mucho self-fashioning; mucho tirar para sí mismo.
Imitaciones y plagios, como apuntaba Gil de Biedma por deuda directa de Eliot, no hay duda.
Para escribir buenos poemas, basta conocer lo contemporáneo. Para escribir grandes poemas, o al menos intentarlo, ahí sí estoy de acuerdo en que es necesario echarse al hombro la mayor cantidad posible de pasado lejano.
Ya te dije, Asterión: Elioy y yo, yo y Eliot. Larga historia. Gracias por rescatarlo una vez más.
(Eso es lo que hace uno que no es ni bueno ni mal poeta, ni sin experiencia ni avezado, ni nada, porque no es poeta: transcribir tres versos que lo han impresionado del poeta del que se habla).
Saludos.
Nada es original. Robá de donde sea que te resuene y te inspire o fustigue tu imaginación. Devorá películas viejas, películas nuevas, música, libros, pinturas, fotografías, poemas, sueños, conversaciones azarosas, arquitectura, puentes, carteles en la calle, árboles, nubes, cuerpos de agua, luz y sombras. Seleccioná y robá solamente aquellas cosas que te hablan directamente al alma. Si hacés esto, tu obra (y tu robo) será auténtico. La autenticidad es invaluable, la originalidad no existe. Y ni te molestes en ocultar tu robo: celebralo si te parece mejor.
("Nothing is original. Steal from anywhere that resonates with inspiration or fuels your imagination. Devour old films, new films, music, books, paintings, photographs, poems, dreams, random conversations, architecture, bridges, street signs, trees, clouds, bodies of water, light and shadows. Select only things to steal from that speak directly to your soul. If you do this, your work (and theft) will be authentic. Authenticity is invaluable; originality is nonexistent. And don’t bother concealing your thievery, celebrate it if you feel like it")
Saludo.
Pero si hemos de mantener o conjugar ambos temas de Eliot, me gustaría suponer que la tradición le da al ladrón no sólo el objeto, sino la técnica de hurtar. Robamos en términos de los valores de nuestra tradición, lo que en ella cuenta como joya o baratija, y robamos con las técnicas antiguas o alguna variación de ellas —distraer a la víctima, sustituir el objeto, disimular nuestra presencia, etc.
En esta tu poética, por lo demás, yo añadiría adagios a los que debería encontrarse su moraleja literaria:
1. Cada ladrón juzga por su condición.
2. La ocasión hace al ladrón.
3. No hay ladrón que no sea llorón.
3. Ladrón que roba a ladrón tiene cien años de perdón.
...
Que entre poetas te veas.
Un abrazo,
Sentenciero: pues sí, ¿qué voy a decir? Aunque todo eso escritor hace eso: citar sin decir o sin saber. Y grande "Degüeistlan".
Juan: más que fragmentos que aumentan ruinas, es conciencia de las posibilidades lo que nos dan los clásicos. Claro que esto vos lo sabés, y por eso concuerdo en la necesidad de repensar, de reinventarlo todo, y sí, como Sísifo, no queda de otra (a menos que se opte por el suicidio, evidentemente).
Leandro: excelentes citas esas que hacés, definitivamente. Hace un tiempo puse un post donde replanteaba algo similar, a partir de una cita, valga la aclaración:
“…glosar es hoy la única actividad creativa –en lo literario– que me parece honesta y divertida. La tan buscada “originalidad” es una fábula sin el menor sentido, torpe y vulgar.”
Luis Alberto de Cuenca
“Cada texto es único y, simultáneamente, es la traducción de otro texto. Ningún texto es enteramente original porque el lenguaje mismo, en su esencia, es ya una traducción: primero, del mundo no-verbal, y después, porque cada signo y cada frase es la traducción de otro signo y otra frase.”
http://asterion9.blogspot.com/2008/11/de-la-traduccin-la-originalidad-y-la.html
MGE: yo también. Bienvenido.
Víctor: ciertamente, los conceptos de originalidad, plagio, autor, etc., son modernos, y eran incluso impensables en el Renacimiento. Por lo demás, has un hecho un buen análisis del significado de "robar", y creo que las citas que acabo de colocar dialogan muy bien con lo manifestado. Por lo demás, la referencia a los refranes ha quedado genial, auqnue puede herir susceptibilidades (sobre todo la de los poetas).
CAQ: sí, ta bueno.
Saluds a todos y gracias por visitar y comentar.
De hecho, ¿hay algo para tratar y para lograr? ¿Logramos ser buenos o es la opinión la que nos hace, digamos, buenos?
Primero es necesario ser leído (o publicado) y juzgado de tal suerte que alguien diga que es bueno y a otro le parezca y otro se le pegue (y se arme la muestra representativa). Así pues: ¿lo bueno, es bueno?
Por supuesto, lo que me llama la atención de la cita es su extraordinaria concisión. Porque al fin y al cabo, en esta cita es donde se condensa todo el problema de la influencia, el robo, la herencia o como se le quiera llamar.
El problema no es robar, intertextualizar, incluir (al fin y al cabo, y en la cita de L A de Cuenca, ya lo dices, toda palabra ya es una herencia anterior; hay palabras que se ponen de moda de repente porque alguien la emplea y entonces empieza a sonar por revistas, etc. Pero divago), decía que el problema no es ese sino cómo y en dónde se incluye lo robado. Leandro, citando a Jarmusch (que parece que cite a Eliot) halla el lugar: en el alma del poeta o en un todo del sentimiento que es único.
Por mi parte (y no soy el único), ¿cuántas veces no habré adaptado canciones a MIS intereses?
Y en el tema de saber si es bueno o malo... la historia y el tiempo dirá. El problema es que a muchos poetas la historia les importa, aunque relativamente, y el tiempo no: lo que quieren es ser reconocidos ya. El mejor consejo para ellos es que no escriban. Adquieran en zen de la poesía y sobre todo la pose. Así, se puede ser poeta laureado sin haber escrito ni un verso.
Un saludo!
Saludos y gracias por visitar.
Lluís: el problema del plagio y de las influencias no es tal en tanto se acepte el hecho de que somos nosotros mismos discurso, y por ende nos interrelacionamos con los discursos que nos preceden y nos conforman. Encontrar el punto en el cual adquiero ua ¨identidad¨ es el asunto al que se aspira a través del trabajo literario.
Y claro, todos queremos el reconocimiento ya, no después de la muerte, aunque muchos lo nieguen. Pero sí, una cosa es esa posibilidad de reconocimiento y otra esa pose que busca los lauros.
Un placer como siempre y gracias por pasar.
http://www.harpers.org/archive/2007/02/0081387
y eternoretornografo
de luis rogelio nogueras.
felipe grana2
Muy bueno el poema, tambièn, y ahí debo decir que el poema "en la aldea", de Esteba Ureña, tiene ecos de este otro.
Saludos y gracias por pasar.