
Al iniciar este 2009, quizá el único propósito que me planteé seriamente fue dedicar más tiempo y espacio en el blog para el cine. Así las cosas, empecé con una reseña sobre la última película de Coppola. En retrospectiva, me doy cuenta de que lo único que me animó a escribir sobre dicho filme fue el tema.
Un mes después, y un buen cúmulo de películas, han sido pocas las que me habrían podido motivar a escribir. Curiosamente, esas que me provocan, a la vez me representan un reto que por ahora he preferido evitar. No sé si sea realmente pereza o mera incapacidad. El asunto es que veo una película, con el ánimo de encontrar ya sea argumentos bien logrados o una realización excepcional, y nada. Buenas películas, puede ser, pero maravillosas, de esas que conmueven todas nuestras bases, casi ninguna.
Por tal motivo, he decidido hacer un breve repaso por algunas de ellas, con el ánimo de compartir y a lo mejor encontrar eco o disidencia en ustedes, mis amables y deferentes lectores. La lista no sigue ningún orden particular. Algunas son regulares y otras muy buenas. Los títulos están en español solo cuando ya han sido traducidos en Costa Rica (y los recuerdo).
Ceguera y The happening
Mucho se ha hablado de Ceguera, de Fernando Meirelles, basada en una novela del escritor portugués José Saramago. De primera entrada, debo decir que Saramago no me ha desvelado nunca, y aparte de algunos artículos sueltos por aquí y por allá, solo he leído El hombre duplicado, ingeniosa novela sobre el tema del doble. La película en cuestión hasta podría ser aceptable; lo que no logro comprender es el entusiasmo unánime de la crítica. Desde esa perspectiva, no deja de ser un mero ejercicio, más en la línea de La noche de los muertos vivientes u otras películas con el tema del extermino humano. Que si el tema de la solidaridad, de la construcción de las relaciones humanas, el peligro de la vida actual, etc. Puede ser, pero un tema no genera una gran película y es lamentable ver este filme después de la excepcional Ciudad de Dios y un buen trabajo como El jardinero fiel.
La coloco junto a The Happening, última producción de M. Nigth Shyamalan, tan ingenioso director como irregular y truculento pueden ser algunos de sus trabajos, pues en dicha producción, una extraña epidemia empieza a atacar a la población en diferentes partes del mundo; y lo que parece no tener explicación en un primer momento, resulta que se debe a un mecanismo de autodefensa de las plantas. Mensaje ecológico de fondo en una película que pretende ser un homenaje, volvemos, al cine clase B. Esta película, igual que Sings, del mismo director, es sencillamente ridícula. Ceguera no cae tan bajo, pero no puedo decir que esté muy lejos.
Slumdog Millionaire
Siguiendo con el tema del exterminio, de los mejores intentos en los últimos años son 28 días después y Sunshine, ambas de Danny Boyle, el mismo director de Trainspotting. Es claro que las películas de Boyle presentan un universo mucho más complejo y más rico cinematográficamente. Además, se ha caracterizado por generar propuestas más arriesgadas. Curiosamente, su última película, Slumdog Millionaire, transita por otros territorios, que aunque visualmente cautivantes y hasta sobrecogedores en ciertos pasajes, apuesta por una estética más acorde con la corriente: no en balde fue la gran ganadora en la entrega de este año de los Golden Globe y está en la carrera por los Oscar. Es una buena película, con un excelente trabajo de fotografía y un guión ingenioso. La historia nos presenta a Jamal (Dev Patel), un joven pobre de Bombay, quien contra todo pronóstico está a punto de ganar veinte millones de rupias en el programa ¿Quién quiere ser millonario? Ante la incredulidad o la envidia, es acusado de fraude. Durante el interrogatorio, la película nos lleva, mediante una serie de flashbacks, a los eventos que fueron marcando su vida, y de qué modo cada uno de ellos se relaciona con las preguntas que ha logrado acertar. Aparte, el film resulta retrato y denuncia de una sociedad india colapsada por una serie de problemas de toda índole. Ciertamente, como gustan los gringos de presentar este tipo de películas, es una “feel-good movie”, con un protagonista que logra superar todos sus obstáculos, y cómo no, reunirse con el amor de su vida. La secuencia de créditos, además, rinde un homenaje a Bollywood, el mayor productor de películas del mundo. A la vez, refleja los fuertes vínculos, para bien o para mal, que han existido entre Inglaterra y
Fur: an imaginary portrait of Diane Arbus
Hablando de pelo, o de pieles, Steven Shainberg, realiza una película seductora, con calidad en el tratamiento tanto del tema como de las imágenes. Se trata de Fur, protagonizada por Nicole Kidman, quien da vida a la fotógrafa neoyorquina Diane Arbus, mujer que vive una vida anodina al lado de su marido, fotógrafo él mismo, y cuya vida se ve transformada cuando al edificio donde viven se muda una peculiar figura, un hombre que padece una enfermedad que hace que el pelo le crezca desmesurada e incontrolablemente por todo su cuerpo. Su llegada despertará en Diane una serie de sensaciones y sentimientos hasta ahora ocultos, que acabarán por cambiarla completamente.
Revolutionary Road
Y para seguir con vidas anodinas, Sam Mendes, el mismo que debutó con gran éxito con Belleza americana (Mena Suvari en lecho de rosas incluida), y continuó con otro camino, en esa ocasión hacia la perdición, nos trae ahora esta película, sobre una pareja, él vendedor en una compañía; ella actriz sin éxito, que decide ir a vivir a los suburbios. La historia es una vuelta de tuerca sobre la temática de la familia disfuncional gringa, en la que el trabajo fotográfico sigue siendo clásico y equilibrado (Mendes gusta de colocar a los personajes perfectamente enmarcados en puertas y ventanas), con buenas actuaciones de parte de Kate Winslet y Leonardo DiCaprio.
El único problema de Mendes, al tocar esta temática, es que por la misma época que lanzó Belleza americana, el mejor director joven de los Estados Unidos, Paul Thomas Anderson (Hard Eight, Boggie Nights, Punch-Drunk Love, There will be Blood) dirigía la excepcional Magnolia, la cual hacía palidecer cualquier otra película puesta su lado, y demostraba que donde Mendes parecía ácido y crítico, no era más que un joven burgués desencantado y pretencioso. Sin embargo, es justo reconocer que Revolutionary Road, sin los artificios y trucos de Belleza americana, es un trabajo más maduro y logrado.
Vicky, Cristina, Barcelona
Y no podía faltar el maestro de las familias disfuncionales y personajes neuróticos: Woody Allen. Y aunque Allen ha sido irregular en sus comedias de los últimos años, en esta ocasión logra desarrollar una película con encanto y delicadeza. Claro, debo reconocer que mucho de esa delicadeza y encanto se debe en parte a la ambientación de la película en España (Madrid, Aguirre y Oviedo). En ese país, acudimos al viaje que realizan dos turistas gringas, Cristina (Scarlet Johansson) y Vicky (Rebeca Hall); la primera impulsiva y siempre en busca de relaciones amorosas regidas por el caos; la segunda, centrada y ecuánime, con una vida matrimonial ya planeada. Ellas conocerán a Juan Antonio (Javier Bardem), un pintor, quien mantendrá una relación con ambas, hasta que su ex esposa, María Elena (Penélope Cruz) haga su aparición.
Nota aparte: no soy anglófilo, pero qué diferencia escuchar a Bardem hablar inglés después de escuchar a Cruz.
Es definitivo que el cambio de aires ayuda a Woody Allen, como lo demostró en Match Point, magnífica obra rodada en Londres. Allen es quizá el director más prolífico, que aún a esta edad, mantiene un ritmo único de una película por año, y con tal ritmo, no es difícil repetirse.
Vacas
Nos quedamos en España y con un director que no se repite, probablemente el mejor director español de los últimos años, por encima de Alejandro Amenábar. Me refiero a Julio Médem (La ardilla roja, Tierra, Los amantes del círculo polar, Lucía y el sexo).
Ambientada en tierras vascas, esta película relata el enfrentamiento de dos familias vecinas a lo largo de tres generaciones, desde 1875 (tercera guerra carlista) hasta 1936 (guerra civil). El estilo de Medem ya se hace presente desde este su primer film, con juegos surrealistas y ambientaciones oscuras. Las vacas, como testigos mudos de los acontecimientos, están dotadas de gran simbolismo. Asimismo, los silencios, tan presentes en su obra, se reproducen para manifestar el carácter obsesivo de los protagonistas, desde enfrentamientos, batallas, apuestas y competencias hasta las conflictivas relaciones amorosas, donde el tema del incesto es tratado, con toda la carga psicológica que pueda representar. Sin duda la mejor de este lote que aquí he reseñado.
Aún me falta comentar las siguientes películas, a saber: La escafandra y la mariposa, La señal, Expiación y pecado, Quémese después de leer, Wilde, Breaking and Entering, Sleuth, La vida de los otros, Una historia de violencia y Promesas de Oriente. De todas estas, puedo decir que las mejores son las tres últimas, especialmente Promesas de Oriente, una joya de David Cronenberg. Espero que la pereza no me gane más y pueda dar término a esta pequeña aventura. Y en caso de que ya las hayan visto, sería genial escucharlos a ustedes comentar.
Comentarios
Ceguera: aquí la crítica también estuvo unánime, pero para mal: a nadie le gustó. Yo no la fui a ver, aturdido por estos denuestos, pero el libro me gustó mucho, junto con el Evangelio. Otros libros de Saramago me han pasado por las manos sin pena ni gloria.
Danny Boyle: es un tipo muy extraño en el mundo del cine. Sus películas no parecen tener un hilo de género, son todas muy distintas entre sí. Uno puede no estar de acuerdo con alguna en particular, pero yo siempre trato de pensar que la hizo el gran Danny Boyle de 28 days later o de la genial Trainspotting. A mí no me gustó nada, por ejemplo, The Beach. En alguna parte de Seikilos escribí sobre Sunshine (y sobre Sleuth).
Woody Allen: hace mucho que ya no voy a ver sus películas. Estoy completamente desanimado con él. Esa que te gustó tanto, Matchpoint, fue el clavo de su ataúd para mí.
De las que todavía no comentaste, me detengo en dos. De Wilde me encantó la actuación de Fry, excelente en el papel de Oscar, pero la trama hizo demasiado incapié en la sexualidad del escritor, descuidando otras que son igual de interesantes. A veces se peca por omisión, y a veces por exceso: creo que todavía hay que encontrar el equilibrio en el retrato de estos grandes como él o como Alan Turing, para quienes ser homosexual fue un gran problema, algo que aún hoy algunos quieren olvidar y que otros quieren hacer el tema exclusivo de una biografía, soslayando toda otra cosa. Hoy día la homosexualidad de Wilde debería estar indiferentemente enumerada entre sus otros atributos, como su dandismo, su genialidad epigramática o su dramaturgia.
A history of violence me gustó en ciertos aspectos. Al igual que la mejor The Woodsman, trata de un hombre que intenta hacer una vida normal cuando un pasado radical lo arrastra. Viggo Mortensen está muy bien, pero Cronenberg nunca terminó de convencerme con ninguna de sus películas: siempre algo falla para mí. No vi Eastern Promises, sin embargo.
Bueno, me encanta que escribas también sobre cine. Siempre es bueno intercambiar pareceres sobre películas, recomendar alguna, advertir sobre otras, ahondar sobre cosas que uno ve, escribir la propia lectura de una película. ¡Que no te gane esa pereza nunca!
PS: No descuides el cine oriental: todo lo interesante está viniendo desde ese lugar.
Tavo A: y eso que de un tiempo para acá ha disminuido bastante la cantidad. En mi caso, por el contrario, sí digo que soy un apasinado del cine. Aficionado no más, pero me encanta. Y sí, a ver qué tal esos "Ojos".
Leandro: pues qué bueno. Aquí dijeron que "Ceguera" era una obra maestra.
No recordaba The beach, de Boyle, cierto. Una cinta menor. Lo mejor que ha hecho es "Trainspotting".
Alen me parece irregular y flojo en sus comedias últimas: "Small times crooks", "Hollywood ending", etc. Es un tipo que se las sabe todas, y como en "Hollywood ending", que el director queda ciego, así debe filmar él más de una vez. POr eso "Match point", en tra líena, me pareció mejor desarollada (y no sale él, debe ser, jeje).
"Wilde" está bien hecha, tanto así que a pesar de ponerle mil peros, el final me gustó. Pero floja en general. Y concordamos, dejó de lado todo el problema estético. Típico de los biopics.
De Cronenberg he visto "The fly", que me parece menor; "Crash", muy buena; "Existenz", algo pretenciosa; y estas dos últimas. Eso de que algo siempre falla, debo confesar que me pasó en "Eastern Promises". Hay un detalle, bueno, más que detalle es cierto grado de resolución que le resta fuerza a la película, a lo mejor por eso al final no escribí, pero es muy, muy buena.
Y vamos a ver qué hago cn esa pereza.
Respecto del cine oriental, tenés toda la razón. Al hacer esta nota, era obvio que casi todo era anglosajón. Aquí tengo mil dificultades para conseguir buenas pelis, sea en el cine o en los videos. Bajarlas igual es frustrante, porque no están o duran toda la vida. Pero es cierto, Oriente siempre ha sido excelente.
Hay una china muy buena, "El violinista", que vi hace poco. ¿La conocés?
En cuanto al europeo, "La escafandra y la mariposa", por ejemplo, aburridísima... y apenas recién llega al cine este fin de semana. De Europa lo mejor ha salido de Dinamarca, Holanda, Bélgica o Finlandia, por ejemplo.
¿Conocés "El blues de la pizza rusa" o "Toto, el héroe"?
Saludos y gracias a los tres por pasar y comentar.
Shyamalan necesita, primero, conseguirse un escritor que le haga los libretos (preferiblemente adaptados de alguna buena novela y no basado en sus inverosímiles y infantiles ideas). Una vez hecho esto, debe buscar un buen director que dirija ese libreto. Mientras se filma la pelicula, él debería tomar un avión e irse de vacaciones a Cancún para que no estorbe el rodaje. Una vez terminada la película debe solicitar que el programa de protección de testigos le cambie el nombre para que por fin nos podamos ver librados de sus posturas autopromocionales mientras vemos alguna película decente (y no las suyas).
El Happening es, ya desde el título, detestable. La premisa en la que descansa es inverosímil. Lo que sucede en la pelicula tambien (un padre que en media crisis mundial de suicidios le encarga su hijo a unos amigos como si fuera un momento a comprar leche al super de la esquina). Los diálogos, el efectismo de las tomas que se suponen dramáticas, sus cameos repugantes, en fin, no digo más porque me dan náuseas...
En cuanto a Ceguera, no la he visto, pero la novela es muy buena, de verdad da una idea de porque a Saramago le dieron el Nobel. Ceguera la película fue la ocasión de una protesta de ciegos que haciendo un picket frente a los cines, afirmaban que en la pelicula se mostraba una imágen denigrante de los ciegos. Corriendome le riesgo de parecer de mal gusto, la verdad es que esa protesta no deja de parecerme super chistosa.
Puña, lo dejaste sin cabeza, jaja, al pobre de Shyamalan. Es cierto, un director sobrevalorado en todo sentido. Sinceramente, creo que sus dos primeros trabajos son aceptables (aunque se le vea el truco en la primera); y la segunda es una interesante relectura del mito del héroe y los cómics.
Pero después de eso, que apenas da para el gasto, el tipo se la creyó y siguió perpetrando lo que fuera. Su marca personal deviene trivia: ¿con qué irá a salir? Y puta, sale con "Signs", "The lady in the water" ("The village" la tiro al primer canasto), sale con "The happening", que son de los peores bodrios que he visto en los últimos años.
Hace poco me mandaron un correo con los títulos alternativos de sus películas, lástima que lo borré, pero debe circular por Internet. El de "The happening" era "La clorofila asesina".
Saludos.
Gracias por dejar comentario en mi blog.
Podes ir cuando quieras, siempre pongo comentarios de las peliculas de la semana.
Buen blog, estructurado, pesimista pero intersante.
El cine es un fenomeno sociologico, es decir, solo en grupo se aprecia en su totalidad, no te ries igual, lloras igual o te llega igual la cinta que cuando la vez en sala, por eso trato siempre de ir a verlas al cine cuando se puede. La crítica y el comentario tambien suma el inconciente colectivo de las personas, es como el bostezo, algunas veces alguien te pega, por asociación, algun sentimiento ante la gran pantalla.
Buen blog, pasando a saludar y a invitar.
Si deseas podemos hacer intercambio de links.
La clorofila asensina no podía llamarse así porque las películas de Shyamalan pivotan únicamente sobre un elemento que el autor tiene escondido del espectador y si ese elemento sus peliculas basicamente no existen. Este es el caso de sus 'mejores' novelas, Sixth Sense, The Village. En la terrible Lady in the water se observa un ejercicio poco usual, como hacer TODA la pelicula alrededor de un intento de averiguar ese dato que no se conoce. Shyamalan es lo que llaman un 'one trick pony' a quien además, tristemente, no siempre le sale bien el truco.
Lo que decís de la sala de cine, lo comparto plenamente. La experiencia de "ir al cine" no se compara con el video en casa. Yo solía ir hasta tres veces por semana al cine, pero claro, las circunstancias cambian y ahora se me complica más por muchaas razones.
En ese sentido, era capaz de ir a ver montones de cosas solo por pasar el rato, a sabiendas de que no me iban a gustar.
Gracias por la visita y claro que podemos intercambiar links. Ya he agregado el tuyo a mi lista.
Saludos.
Juan:
Creo que fue en "Puente Aéreo" donde leí la lista de nombres, pero no me acuerdo.
En "Lady in the water" hay una escena terrible, donde un niño ve señales en una caja de cereal. Pensé: "no, no, este mae está bromeando, y se está burlando de la gente que busca señales en todo, jaja". Pero creo que no estaba bromeando.
Respecto a Oriente, tienen tanto... tienen a Kitano en el género policial (puede decirse), películas románticas de la talla de "Con ánimo de amar" (Wong Kar-wai), tienen cine de fantasmas de gran ambientación ("A tale of two sisters", "Box", notables), por no hablar de las épicas de Zhang Yimou, que tienen una estética extraordinaria, o las buenas pasatistas como Kung fu Hustle. Y muchas, muchas películas inclasificables, como Oldboy, La nube errante, The Host, El sabor del té, I'm a Cyborg, But That's OK, Dumplings, Exiled...
Won Kar Wai es buenísimo. La peli que citás es muy bella. La uqe citaba, "El violinista", muy buena.
Y bueno, en el género épico realmente ni hablar. Las joyas más extraordinarias que he visto: "El emperador y el asesino" y "Héroe". "La maldición de la flor dorada" es muy buena, pero se queda corta a la par de "Héroe".
Y las que citás, ya están apuntadas, a ver si algún día tengo suerte.
Ojalá que podás ver "Eastern promises". Saludos y gracias por la visita.