Algo más de Adam Zagajewski
Somos tan prosaicos, tan ordinarios. ¿Acaso merecemos la poesía? Pero también, seremos leyendas para las futuras generaciones, porque una vez vivimos, y nuestra palabra significará más de lo que hoy nos preocupamos por admitir.
“The Shabby and the Sublime” [Lo sublime y lo raído], p. 49.
Lee a tus enemigos y a tus amigos, lee a quienes refuerzan tu sentido de qué es lo que se está transformando en la poesía, y también a aquellos cuya oscuridad, malicia, locura o grandeza no puedes entender todavía, porque solo de esta manera crecerás, te sobrevivirás y te convertirás en lo que eres.
“Young Poets, Please Read Everything” [Por favor, jóvenes poetas, lean todo], p. 190.
Trad. del inglés por Gustavo Solórzano Alfaro, 2009. En Adam Zagajewski, A Defense of Ardor (trad. del polaco: Clare Cavanaugh), New York: Farrar, Straus and Giroux, 2004.
Autorretrato
Adam Zagajewski
Entre la computadora, un lápiz y una máquina de escribir
paso la mitad de mis días. Uno de esos días será medio siglo.
Vivo en ciudades extrañas y a veces hablo
con extraños acerca de asuntos ajenos a mí.
Escucho bastante música: Bach, Mahler, Chopin, Shostakovich.
Veo tres elementos en ella: deblidad, poder y dolor.
El cuarto carece de nombre.
Leo poetas, vivos y muertos, quienes me enseñan
tenacidad, fe y orgullo. Trato de comprender
a los grandes filósofos –pero usualmente solo capto
retazos de sus preciados pensamientos.
Me gusta dar largos paseos en las calles parisinas
y observar a mis semejantes, estimulados por la envidia,
la rabia, el deseo, rastrear una moneda de plata
que pasa de mano en mano mientras lentamente
pierde su forma redondeada (el perfil del emperador se ha borrado).
A mi lado, los árboles no expresan nada
excepto una perfección indiferente y verde.
Los mirlos sobrevuelan los campos,
y aguardan pacientemente como viudas españolas.
Ya no soy joven, pero siempre hay alguien mayor.
Me gusta dormir profundamente, dejar de existir,
y pasear en bicicleta por caminos campestres, mientras los árboles y las casas
se disuelven como nubes en días soleados.
Ocasionalmente, las pinturas me hablan en los museos
y la ironía se desvance de repente.
Adoro atisbar la cara de mi esposa.
Todos los domingos llamo a mi padre.
Cada dos semanas me reúno con mis amigos
y así pruebo mi lealtad.
Mi país se liberó a sí mismo de un demonio. Ojalá
le siga otra liberación.
¿Yo podría ayudar en esto? No lo sé.
Ciertamente no soy un hijo del océano,
como Antonio Machado escribiera sobre sí,
más bien un niño del aire, menta y violonchelo,
y no todos los caminos de un mundo enaltecido
cruzan sus senderos con la vida que –hasta ahora–
me pertenece.
Trad. del polaco: Clare Cavanagh. Trad. del inglés: Gustavo Solórzano-Alfaro, 2009. Aquí la versión en inglés.
Comentarios
Que difícil es hablar de las influencias sin caer en el name-dropping o en la aseveración genérica como la de los filósofos arriba. Sin duda la mejor parte es la de las casas y las bicicletas, cuando el poeta ya ha muerto.
Del poema,me encanta su ambiguo pesimismo unido a la sencillez de disfrutar lo cotidiano.
Pero donde vos matás al poeta y dejás a otros visitarlo en bici, yo lo hago dormir y simular que la vida cesa.
¿Quién tiene la razón? No sé. Y ahora voy a tener que ir a bucear para buscar el original polaco, como si no tuviera ya suficientes enredos este finde.
La foto le queda muy bien al pósting: muy caída en tierra, sin aleteos si poses raras.
Ahora, por otra parte, no sé si entendí bien la primera parte del mensaje del señor Murillo. Espero que sea una humorada. De lo contrario, no sé qué pensar.
Saludos.
Sì, la parte de las bicicletas es muy buena, con el poeta muerto, aunque G.A. nos corrija.
Poeta Luissiana: puede ser, sin embargo, yo me apego a la idea de que el autor no es el yo lírico, por lo que no necesariamente este también tenga esposa. ¿Y cuáles son tus teorías sobre la identidad del poeta?
El poema es muy delicado, lo cotidiano contemplado con melancolía.
G.A.: en esto de traducir vos sos el maestro. Y ya sabemos, también culpable de que yo conozca a don Zaga. Yo con costos macheteo el inglés.
No había visto este poema en tu blog, pues empecé a leerte como el año pasado, a saltos y a brincos.
La parte de la bicicleta fue una que me dio problemas. Varias veces volteé la frase. Pero como considero que una traducción debe convertirse en otra cosa, me dejo llevar y al final pongo lo que se me ocurre. Sin embargo, creo que la forma que vos le diste es la mejor.
Álamos, esa era la palabra. No logré encontrar que tipo de árboles eran, entonces se quedaron en árboles. Los cúmulos preferí dejarlos como nubes.
Sobre la expresión "Spanish widows", de hecho te iba a preguntar, porque algo me dice que significa otra cosa. No sé por qué, pero me saca del poema.
Y finalmente, el cello original, a pesar de que ya se ha mencionado la música, no me pareció justo. Si no me equivoco, es una especie de abreviatura de celofán, así que me quedé por ahí y me sonó. Pero ahora que vi que pusiste "violonchelo" también me parece lo mejor.
Y ahora, dejá de lado tus tareas, andá a practicar tu polaco y nos contás.
Y sí, la foto calza muy bien.
Carolina: desde que leí los ensayos de don Zaga, me tiene dando vueltas. Es magnífico. En este post puse el link para la otra traducción que hice. Y los pocos poemas que he leído hasta ahora también son muy buenos.
Saludos a todas y a todos por pasar y gracias por comentar.
Y buscando encontré este dato en http://www.msz.gov.pl/files/file_library/42/20020715h_7212.doc
donde en una entrevista, Adam indica que no había regresado a Polonia hasta que su hija se independizara, lo que implica,(suposición) o que su esposa murió y él asumió su paternidad responsable o que como familia estarían donde todos lo asumieran como decisión conjunta.
Aparte, siento a Zagajewski como un poeta muy leal a su "yo" lírico, según he leído en algunos de sus ensayos sobre la poesía, a excepción de otros, por supuesto que no es regla.
Y esa pierna de cruce en la foto como pose de contemplación(lenguaje corporal) me hizo suponer que el poeta era el de primera plana, el sentadito.
También estuve comparando las traducciones de los dos tocayos, creo que se pueden complementar. Es importante que Chaves dejara la palabra música en dos de los versos (facilita la interpretación), "cada dos semanas" fue una salida inteligente también y me gustó mucho que conservara la palabra criatura (bastante más sustanciosa que prójimo), aunque "fellow creatures" pudo haber sido "criaturas, como yo".
Saludos.
Luissiana: la foto realmente delata, por prejuicio o lo que sea: está alejado, su pierna cruzada... Hay algo ahí.
Mon: para mí Zagajewski ha sido un gran descubrimiento, gracias a mi tocayo.
Con tus sugerencias, y viendo la traducción de Tavo A., he hehco algunos cambios. Dejé música una sola vez porque dos me choca. Ciertamente "semejantes" es más acertado, pero así, sin "criaturas". Cambié "cada dos semanas", pero entonces también cambié "cada domingo" por "todos los domingos".
Le di vuelta de nuevo a la frase sobre las bicicletas, y ya el yo lírico no está muerto y es él quien anda en bici.
"Blackbirds" definitivamente es mirlo o totí, y creo que en CR no hay, aunque la variedad del totí sí la hay en Cuba, por lo que en español tico debería ser solamente pájaros. Igual debería ser con los álamos, que aquí no hay, y si se ha usado español tico, como "tanates" o "bici", que me parece muy acertado, debería usarse "árboles".
Saludos y gracias por pasar.
Respecto a la foto, yo también pensé que era el de la pierna cruzada, pero por la cercanía y la posición que tiene respecto del libro (es el que lo estaba leyendo).
Saludos otra vez.
Warren: es polaco. Yo solo puedo medio leerlo en inglés. No sé si por aquí se puede conseguir algo en español.
Me gustan esos poemas que parecen confeciones, de traiciones no entiendo nada... y solo opino cuando me gustan y cuando no.
Curiosamente lo que más me gusta es cuando hace referencia a los filósofos, y que apenas retiene algunas ideas sueltas... no sé, esa sutileza es lo que realmente me gusta...
Saludos y gracias por pasar.